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| Foto vía: The Peoples Person |
El pasado sábado el United venció
al Arsenal tras un muy buen primer tiempo ofensivo, y una segunda parte donde
David De Gea se convirtió en el gran héroe mancuniano. Un partido veloz y
cargado de diversas propuestas ofensivas que dejaron un pequeño detalle donde se
debe indagar más: el esquema. El 3-4-3 es el sistema ideal para un Manchester United
que, hasta el momento, solo lo ha empleado cuando el rival jugaba también con
línea de tres. No obstante, la plantilla parece diseñada a conciencia para usar
un renovado estilo que es sinónimo de buen fútbol.
La pasada campaña José Mourinho
sorprendió en más de una ocasión al formar con tres defensas y dos pivotes,
adaptándose al rival, siendo el enfrentamiento ante el Chelsea el gran punto
álgido de esta pequeña metamorfosis. Los chicos del técnico luso no solo fueron
capaces de acoplarse a un esquema diferente, regido por la defensa hombre a hombre,
sino que también consiguieron mejorar sus prestaciones. Unos meses más tarde y
tras los fichajes de Nemanja Matic y Victor Lindelöf, Mourinho se ha encontrado
con una amplia plantilla que, casualmente, se adapta al 3-4-3 casi como si se
hubiera preparado adrede.
Debido a la excesiva cantidad de defensas
(Lindelöf, Rojo, Smalling, Bailly, Jones, Blind, Darmian, Valencia, Luke Shaw y
el sorprendente Ashley Young) José Mourinho podría presentar dos líneas de
cinco totalmente distintas, que formasen en un once donde existen pocas
opciones para el medio campo. Paul Pogba, Maroune Fallaini, Ander Herrera y
Nemanja Matic son los pivotes de la plantilla, a los cuales hay que sumar a McTominay
y, un poco de aquella manera, a Michael Carrick (pese a que el veterano inglés
parece que tardará más en empezar a jugar, si es que consigue tener minutos
debido a los problemas físicos). Quizás en el mercado de invierno deban buscar
una ayuda extra, aunque por el momento cuatro centrocampistas son un número
perfecto para jugar… 3-4-3.
Las alternativas ofensivas son
amplias, el fondo de armario, en general, es grande. Pero, igual que sucede en
la defensa, en la zona de ataque también hay puños por poder jugar. Romelu
Lukaku es, quizás, el único jugador con la titularidad asegurada. Por ahora,
Zlatan está empezando a recuperar su mejor nivel y, cuando lo haga, Lukaku no
lo tendrá tan sencillo. Por detrás del nueve, en este esquema con dos segundos
punta, Martial y Marcus Rashford parecían los ideales, pero es Jesse Lingard el
que se ha erigido como el hombre del momento tras un par de buenas actuaciones.
A estos tres jóvenes y veloces jugadores, se les añade a Juan Mata, la clase y
el único 10 puro del elenco, y Henrikh Mkhitaryan, que, aunque pasa por un mal
momento físico y futbolístico, atesora una calidad brutal y la posición de
segundo punta, jugando con esa libertad, le vendría al pelo.
José Mourinho cuenta con un
plantel de una calidad indiscutible, perfecto para todo tipo de esquemas. Lo
más probable es que el 4-2-3-1 siga siendo el elegido, pero, cuando el rival juegue
defensa de tres, The Special One tendrá
ese AS en la manga que se guarda para ciertas citas, como si de la corbata más
hermosa y estilizada se tratase.
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Autor del texto:
@SilveiraAbarca
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